"Fulano de Tal"

                 “FULANO DE TAL”

Yo,Fulano de Tal,aparente padre impuesto de un tal Fulanito del mismo apellido,he llegado a la conclusión ante lo irreal de mi existencia que es hora ya de despedirme de este mundo a veces tan inexistente como yo si partimos del criterio de que siempre nunca nadie lo conoce verdaderamente.Desde tiempos inmemorables se me ha estado señalando,muchas veces por la envidia,como alguien con el famoso valor de un cero a la izquierda. También esto  ha sucedido con mis parientes Sutano,Mengano,Esperancejo y Don Nadie.Hemos sido tratados

como señales de trânsito para señalar a alguien que no tiene una dirección propia o te la da equivocada.Se dice que nuestros nombres,por los que nos llaman,procede de la progenitora Patria;

de Madre si es asi!!!.Lo cierto es que entiendo que ya no debo existir mas y con menos valor que el llamado Anonimo que en la gran mayoría de las veces esconde su poco valor real que no lo haría ni merecedor de pertenecer a la familia de los Fulanos,

Sultanos,Menganos y Etcetera que es otra que es muy utilizable sobre todo cuando la memoria falla o cuando ciertamente el que la utiliza no sabe mâs nada que decir y asi todo a élla se le da un reconocimiento gramatical.

Se que en este mundo poblado de inexistentes nosotros no somos los únicos enganchados con el rótulo de insignificantes

pues,para consuelo de tontos,a diario se ven ejemplos de cosas mal hechas y que las venden como buenas y muchos de los llamados inteligentes salen a comprarlas.Por todo lo anterior y por muchas cosas mâs que pudiera decir, pero que se que no le interesaría a nadie,había decidido poner fin a mi existencia física.Lo malo para ustedes va a ser que si lo hiciera a partir de ahora no van a tener a quien echarle la culpa de sus brutalidades

 cuando quieran demostrar su superioridad intelectual a travez          del ego,arrogancia,orgullo,envidia,avaricia,vajesa,vanidad….En fin,nadie me da derecho de borrar de la lista de la vida a los verdaderos Sutanos,Menganos y, por qué no?,etceteras también.

Modesto Reyes Canto.

Arte: Karen Reyes.

" Eso no se Toca"

“Cuidadito….Eso no se toca!....Esa frase que da nombre a este artículo verdaderamente comenzaba con una palabra muy utilizada en los laboratorios cuando quieren investigar algún tipo de parâsito intestinal.Esa misma palabra se la interponian cariñosamente a cualquier niño cuando sus progenitores o persona mayor cercana,no querian que dicho pârvulo tocara algo que pudiera hacerle daño o que se fuera a romper.

Y así sigue la palabrita del “détente”a través de nuestras vidas. Resulta ser que, como resultado de investigaciones muy serias o por lo menos costosas, se ha descubierto que casi todo lo que nos rodea y a lo cual hemos estado expuestos por sus usos cotidianos, ahora se les debe aplicar el “eso no se toca…hace daño”.

Según esas pruebas superfiltrosas de los científicos, fumar, por ejemplo, es muy dañino para la salud y el bolsillo. Sin embargo,antes a dúo con Sarita Montiel(que cuando aquello estaba Sarisima y cualquiera la iba a obedecer) cantabamos aquello de ‘fumar es un placer genial, sensual”. Ahora el que enciende un cigarillo es un apestado, aunque lo encienda cinco millas mar afuera o en un cementerio, y probablemente hasta lo acusen de ser el causante del hueco en la capa de ozono. Por tanto, eso no se toca.

Beber una copita de algún roncito, un wiskicito, o un tequilita era de hombres y asi lo veiamos en cuanta película se proyectaba y lo mismo hombres que mujeres en coro alcoholizado cantabamos aquello de:” Sírvame en la copa rota…! Ahora nos dicen que el alcohol es un veneno mas mortífero que masticar los vidrios de la famosa copa rota.Y eso no se debe tocar.

Y seguimos con los detentes: El exceso de sexo da taquicardia y puede llegar a tuberculizar y producto de la cantidad de enfermedades de trasmisión sexual que existen en la actualidad se recomiendan tantas precauciones que hay que tomar, que verdaderamente ya uno no sabe si lo que va a tener es un ancuentro sexual o una guerra para ver quién mata a quién.

Y la lista sigue: El sol da cancer de la piel. y al enfrentarlo hay que usar protectores para la piel, aunque ultimamente se han detectado que algunos de esos protectores dan mas cancer que el propio sol. El café afecta los nervios. La gracita del bistec da cholesterol y la del puerco te tupe las arterias  que ni un plomero después te las puede destupir. El azúcar, menos la que gritaba nustra y de todos Celia Cruz, pica los dientes y da diabetes. La sal es un veneno que acorta la vida y, aqui cabe preguntarse:Si todo lo demás no lo puedo tocar para que quiero que la muerte no me toque?.

También hay informes supuestamente muy científicos que alertan muy claro sobre el consumo de pescados y mariscos y como ya también lo de la carne de res estâ en la lista de los productos peligrosos, aunque las vacas estén locas o no, y la del cerdo en las advertencias médicas como algo desastroso para la salud humana donde también se colocan la aves de corral como posibles portadoras de bacterias mortales, lo cierto es que ya no se puede decir como antes que “lo que no mata engorda” pues ahora lo que engorda mata y no se debe tocar.

Y de las medicinas ni hablar. Casi todas las que se adquieren por recetas médicas tienen  efectos secundarios dañinos, mâs que la propia enfermedad que se pretende curar, que es mejor ni tocarlas y de las naturales que te venden sin receta para lo único que sirven verdaderamente es para gastar tu  dinero que los vivos te quieren tocar . Por lo tanto, cualquiera de las dos, con receta o sin, lo mejor es no tocarlas. De todas maneras cuando te toque irte, por lo que sea y sin importar el toqueteo que hiciste en vida. sino porque y ya te toca, la que te va a llegar no va a tener ningún freno que le diga que no te puede tocar. Asi que ahora, toque usted todo lo que le de su ralisima gana y olvidese de lo que se puede tocar o no.Eso si, respetando el mandamiento bíblico de que “no desearas a la mujer del prójimo” y mucho menos toquetearla. Aunque y por tanto, agrego, no debes querer tocarla, pero,siempre hay uno, que debe suceder si es élla quien desea a uno y nos quiere toquetear?

Autor: Modesto Reyes Canto

Arte: Karen Reyes.

RESIDENTES PERMANENTES.

Quien me lo contó no quiso o no pudo recordar si el local donde se dio el baile existió hace años,meses o dias. Y lo entiendo. Porque con las cosas de inmigración los ilegales son muy reservados porque saben que el hablar de mâs los puede mandar de regreso a su pais. Pero así va la historia que me hizo.

El pueblito en los Estados Unidos donde se encontraba aquel antro convertido en salón de bailes era un lugar donde residian bastantes personas de origen hispano. Algunos vivian allí de manera permanente,aunque fueran mas ilegales que un dolar falsificado. Otros andaban por ahí no mâs,gente pobre que se acercaban a la comarca a tiempo para la recogida de tomate,aji ,y cualquier vianda o vegetal que les ayudara a ganar algo de lo poco que les pagarian y que era mâs de lo que ganaban en sus respectivos paises.

Resulta ser que a un señor,dueño de un bar de mala muerte y peor vida,se le ocurrió la brillante idea de brindar,a la gran cantidad de hispanos que vivían por allí,un baile que sería a todo dar y pedir. Para ello contrajo los servicios de una banda musical que verdaderamente nadie conocía, pero a la que el empresario se encargó de crearle una leyenda artística que ya quisieran para sí los Bukis en sus momentos de mayor gloria; una reputación que dejaba a los Tigres del Norte hechos unos gatos afónicos. Los carteles y volantes de propaganda que mandó a hacer el dueño del bar devenido empresario, eran toda una ruidosa fanfaria que invitaba a la diversion como para que ni el mas aburrido del pueblo faltara al baile: “ El dia tal y a la hora tal en este Centro serâ la única función que ofrecerâ en esta zona la Gran Banda Musical “Los Residentes Permanentes”!!!.

“Esta Gran Banda”,continuaba diciendo el cartel publicitario,ha tenido un lleno total en todos los lugares donde se han presentado! No se pierda este tremendo y único baile por largo tiempo con la gran banda los Residentes Permanentes!.

Los ilegales de aquel pueblito,igual que los que residen en grandes ciudades,casi siempre es a los que mâs les gusta ir un baile. Y lo necesitan, ya que trabajan muy duro toda la semana por tratar de buscarse el mejor pan de cada dia pues para eso vinieron a este pais.

Aunque nadie hubiera oído mencionar jamâs a una banda con ese nombre de los Residentes Permanentes, los anuncios sonaban a buena música y buen baile.

Pero también ocurre que a este tipo de actividad se invitan,sin ser invitados,los agentes de la temible Inmigración que también leen carteles de propaganda, y que casi siempre llegan en el momento en que el baile y el mareo que da el alcohol se encuentran a punto de ebullición.

El baile,tal como estaba anunciado, y rompiendo con la tradición de impuntuales de los latinos en general, comenzó a las nueve en punto de la noche cuando la banda empezó a sonar alegremente y hasta “con cierto concierto” como comentó enseguida un guasón.

Inicialmente de público solamente había unos cuantos borrachos que se encontraban allí quizâs desde la noche anterior. El dueño del bar sufrió unos momentos de pânico pensando en sus gastos. Mas,poco a poco, y según apretaba  aquello que le decian música interpretada por los Residentes Permanentes, comenzaron a llegar grupos, oleadas de parejas, que inmediatamente empezaron a bailar quebraditas muy de moda en aquella época.. Todo se había puesto a pedir de boca para el dueño del local, que vio pasar por la taquilla de entrada a un buen par de centenares de clientes que sin protestas pagaban la suma de veinte dolares por persona y que, sumado al tequila y la cerveza que se consumía como agua en el desierto, daban una respetable suma como para pensar en el retiro con unos cuantos bailes mâs que se dieran como el de esa noche.

Después de dos horas de puras quebraditas, donde mâs de un bailador hubo de quebrarse algo, quizâs por aquello de hacer honor al baile,los Residentes Permanentes se tomaron un receso, para de paso tomarse unos merecidos tragos.

Pasado ese tiempo,el anfitrión, animador y dueño del lugar, se subió al escenario y anunció lo que sería , según sus palabras, “la última tanda musical”. Nunca en la historia de los bailes ha habido un locutor mâs exacto en sus palabras.

--Señoras y señooores! Aprovechen lo que viene a continuación, porque éstas serân las últimas interpretaciones musicales de la gran banda los Residentes Permanentes durante laaargo tiempo en este pueblo y sus alrededores!. Asi pues, que siga la música, que siga el baile y la diversión  y que nadie me pase sed porque no se venda agua!

Y la banda comenzó nuevamente sus entusiastas interpretaciones, aunque un poco mâs desafinada que al principio, en lo que quizâs hayan tenido que ver las muchas rondas de tragos, o el grado del alcohol que se vendía en la casa, porque lo único que no tomaron los músicos fue descanso.

El local donde se llevaba a cabo el baile, es bueno detallarlo, tenía tres puertas; dos laterales y una al frente, por donde horas antes habían hecho su entrada triunfal los Residentes Permanentes. El local tenía también varias ventanas.

Lo que ocurrió a continuación es permitido contarlo sin mencionar nombres.

  “ Siendo las doce y cuarenta y cinco de la madrugada”—según hubiera rezado el acta judicial si se hubiese redactado en México, a uno de los beodos que recibiera a la banda musical Residentes Permanentes a su llegada, le dio la borrachera por salir a orinar al parqueadero del local. Si todo hubiera quedado en ese acto no tan inmoral como apestoso, la cuestión no hubiese tenido males mayores. Pero el borracho, al entrar nuevamente al local tuvo la borracha idea---para él “simpâtica”--, de gritar como para que se escuchara a tres kilómetros la frase mâs temíble para todo el que se respete como ilegal:

--Aquí estâ la Migraaa…!

Aquella temible frase dentro del centro de baile fue peor que si hubieran devaluado el peso mexicano al dia siguiente de una devaluación. Dos grupos de cien personas, incluido el dueño, salieron de cien en cien por donde quiera que había un hueco que sirviera para escapar. Tres borrachos, se dice, aprovecharon la confusión reinante y tomaron gratis todo lo mas posible, y sin siquiera mirar marcas de bebidas, antes de emprender la huida por la puerta de donde precisamente había salido el falso aviso de que allí estaba la Migra.

En cuanto a la banda los Residentes Permanentes, de doce perfectos músicos desafinados, quedó reducida a uno cuando pasado un tiempo volvió la electricidad, que algún ilegal con mente âgil y poco alcohol en su cabeza, desconectó cuando escuchó la palabra Migra.

Desde aquel dia me cuenta el amigo que me relató la historia, es que la Inmigración, enterada posteriormente de lo ocurrido aquella noche, a todo el que se anuncia como Residente Permanente, le piden los papeles inmigratorios para que lo demuestre.

Escribe: Modesto Reyes Canto.

Arte: Karen Reyes.