Dicen que todo comenzó cuando Eva se comió la
manzana. A Ambos, a Adân y a Eva, que supuestamente fueron creados del
polvo, se les habia advertido que no podian tocar ese fruto prohibido porque al
hacerlo caerian en pecado y todo aquel paraíso que les rodeaba se iría para el
carajo. Pero Eva, quizás por la curiosidad innata en la mujer o por calentura incontrolable, decidió no hacer
caso de la advertencia y se comió la prohibida manzana y eso trajo como
resultado que Adán se la comiera a ella. Y de aquel gesto de desobedencia de
aquelos dos seres humanos hechos del polvo salió todo el fanguero que se conoce
hoy dia; La unión entre el hombre y la mujer o entre todos los que se quieran
unir.
Al
pricipio el hombre salía a buscar a las mujeres con un mazo encima de los
hombros. Cuando la encotraba le metía un mazazo por la cabeza, la arratraba por
los pelos hasta su cueva y ahí le aplicaba toda su brutalidad sexual. Después
hubieron otros hombres con mazo igual que, al no encontrar mujeres disponibles
para aplacar sus intintos brutales sexuales y cansados de seguir acumulando
callos en las manos, decidieron colarse en cuevas ajenas, caerle a mazazos al
que tuviera una mujer y quitarsela a la fuerza y arrastrarla a ella por los
pelos también y cambiarla de domicilio, sin permuta oficializada, para la misma
finalidad del primero que la había arrastrado a ella por la cabellera. En fin;
no se porque a ninguna mujer de aquella época no se le ocurrió la defensiva
idea de rasparse al coco y colocarse un bigote falso y así pasar desapercibida
ante cualquier salvaje sexual.
Así se estuvo manteniendo la especie humana por miles de años donde el sexo era a
la fuerza y a mazazo limpio. En alguna época, no se sabe exactamente cuando, se
comenzó a regular la unión entre un hombre y una mujer. Ya no era me llevo esto
porque me da la gana. Ahora había que trabajarla para lograr que los huecos de
salidas de ellas en su cuerpo se convirtieran de entrada también, pues ese
siempre ha sido el objetivo final. Y el hombre se creó mil trucos para lograr
sus objetivos; el halago a la belleza de ella,los regalos (me imagino que al
principio lo que se regalaban eran dinosaurios y otros animalotes grandotes de
la prehistoria) y sobre todo tratar de obtener todo lo deseado por las buenas. Entre esa evolución de lo que posteriormente
se le llamaría amor surge otra figura, aparte de las dos que se quieren unir y,
que por su esperiencia, sabe perfectamente como lograr que el hombre sea el que
reciba los mazazos sin necesidad de sonarselos por la cabeza; La suegra, el
primer invento bélico que registra la historia y de anticonceptivo cuando hace
el papel de chaperona como acompañante
obligada para donde quiera que se fuese a mover la pareja. Esta madre de su
futura esposa y que quizas durante el matrimonio usted se la recuerde muchas
veces a su conyugue, siempre va a querer lo mejor para su hija o hijo y a la
otra parte involucrada en la relación a veces se le va a amargar el matrimonio
por la jodedera de la hija de puta vieja como será bautizada irremediablemente.
Aunque hay que reconocer que hay suegras que como se dice “son un pan de Dios”.
Poco
a poco se fué estableciendo, en nombre del orden jurídico, que para que una
unión fuera vâlida había que hacerlo a través de la firma de papeles
debidamente registrados como manda la ley y a eso se le llamó matrimonio. Los
que optan por casarse legalmente preparan el evento casi siempre acompañado con
una fiesta: bebidas,música, comida, etc,etc. La novia debe ir vestida lo más elegantemente posible y
sobre todo con un vestido llamado de novia que tiene que ser blanco pues ese
color demuestra la virginidad de la contrayente, aunque en lo real, en
cuestiones de cama, tenga mas millas recorridas que uno de esos cohetes
Discovery que recien acaban de pasar a retiro. El hombre se vestirâ, como se
dice, para la ocación, incluyendo el lacito del cuello muy semejante a los que
usa cualquier capitân de un restaurante y que es lo primero que se arranca en cuanto termina la ceremonia matrimonial
por lo incomodo que es y lo ridículo que luce. Una vez consumada la unión
matrimonial ambos se iran a vivir juntos para el lugar habitacional que sus
recursos económicos les haya permitido escoger. Si las cosas marchan bien 50
años después la pareja seguirâ unida y serâ, lo más seguro, hasta que la muerte
los separe como juraron ante el altar porque ya con la edad que deben tener
ambos hace tiempo que a uno de los dos se le quitó el deseo de llevar a cabo
con la otra parte, el dicho juramento que hicieron .
Ahora
bien. Hay matrimonios que desde que se establecen estân condenados a un
divorcio más temprano que tarde; y ahi si se arma tremendo rollo. Sobre todo si
hay bienes mancumunados y cada uno se quiere quedar con lo del otro. Las peleas
en las salas judiciales van a ser más grandes y sucias que las que tenian privadamente cuando ambos se
acusaban de infieles cuando verdaderamente casi siempre los dos lo eran. Ella,
a través del sistema judicial, reclamarâ lo que cree que le pertenece y él harâ
lo mismo. Y en ese dime que te diré, si se trata de una pareja de alta posición
económica, saldrân a relucir de cuanta bajesa uno no se imagina que pueden
realizar los seres humanos y serân la comidilla diaria alimentando a la prensa
morbosa y a los lectores morbosos tambén. Y todo por cada uno tratar de lograr
la mejor tajada del pastel. Lo cierto es que cuesta trabajo creer que un hombre
y una mujer que se juraron amor eterno ante el altar se terminen odiando hasta
desearse la muerte mutuamente con tal de alcanzar la mayor cantidad de ese
poderoso caballero llamado Don Dinero.
Ahora
bien. Entre los pobres también existen desavenencias que pueden llevarlos a un
divorcio pero, como no hay casi bienes materiales y producto de eso mismo ambos
se saben necesitados, casi siempre lo poco que poseen se lo reparten a partes
iguales y si te he visto ni me acuerdo y muchas veces, por no tener recursos
monetarios, ni se divorcian legalmente hasta que no sea que de verdad lo
necesiten. Casi siempre porque van a volver a jurar el amor eterno y el hasta
que las muerte nos separe. Piedras sobran en el camino para escoger como le gusta a uno tropezar.
El
que esto escribe vio un divorcio que fué el más râpido del que haya tenido
noticia. Fué en Cuba, en Rio Verde, Una mujer, encabronada por todas partes, comenzó a tirar
toda la ropa del marido para el medio de la calle y a la pregunta de las
vecinas tratando de averiguar lo que sucedía , ahí mismo, con su contesta,
quedó firmada el acta de divorcio: Me cansé de lavar calzoncillos cagados!!!!.
Lo cierto es que sea
como sea siempre habrâ matrimonios y divorcios; es parte inseparable de esa eterna batalla llamada amor.
Autor:
Modesto Reyes Canto.
Arte:
Karen Reyes.
No comments:
Post a Comment